sábado, 17 de julio de 2010

Hoy.

Es un finde agitado y hace frío, qué novedad.

Hoy desperté con la caricia y el beso de mi amor, qué divino.

Desayuné con mi abuela y me llenó de historias que rayan entre la fantasía y la realidad, qué sentido.

Lavé ropa, imprimí hojas y me siento a escribir, sin tener mucho que decir pero sí con mucho por hacer.

Luego de postear esto estudiaré, resumiré, trabajaré, sistematizaré, escribiré y amaré.

Mejor voy avanzando, no vaya a ser que me quede siempre en futuro y no concretice mi "hoy".

Me voy tranquila, inspirada en una canción que ronda mi cabeza. Aquí se las dejo.



Feliz finde, feliz día, feliz HOY.

lunes, 15 de marzo de 2010

Nuestro primer hijo!




Amor,

Hoy ha nacido nuestro primer hijo, fruto de nuestro amor, de nuestra consideración y respeto como compañeros, como colegas, como seres humanos.

Hoy hemos logrado dejarnos de cuatro cosas, hemos logrado hacer a un lado nuestros deseos particulares por un bien común, y eso es más que memorable.

Ahora con este "bebé" delante, sé que podremos lograr mucho más! He disfrutado mucho nuestra etapa de labor... definitivamente 9 es el número mágico... ha sido mucho más ardua que lo que pensé, pero no por eso menos deliciosa, porque estaba a tu lado.

Me emociona saber que de a pocos vamos logrando cosas juntos. Gracias por apostar por mi, por nosotros, por la confianza, por la paciencia, por tu entrega desinteresada, por tu enseñanza diaria... por todo!

Y sí, como dices, estamos locos!

Un beso, y hasta una nueva amanecida con más bebés forjándose por nosotros.

Yo.

viernes, 19 de febrero de 2010

Something...


Hace tiempo que vengo rondando la idea de volver a escribir en este espacio sin lograrlo. He preferido echarle la culpa a mi nuevo estilo de vida, ahora condicionado al vaivén del mar, marcado por la suave brisa marina del norte... Pero sé de sobra que mi desatención a esta vitrina de compartires se debe a que tengo muchas ideas, sentimientos y sensaciones nuevas en mi que no se cómo procesarlas, cómo canalizarlas, cómo hacerles frente.

Por eso creo importante hacer un ejercicio de lluvia de ideas de todas estas cosas para revisarlas e irlas procesando mejor, a ver qué sale. Ojalá me sigan y no se aburran :)


* Confieso que he pagado un tratamiento de reducción de peso, pero desde que me mudé he sucumbido ante la gastronomía del norte del Perú. Lo peor de todo es que me siento riquísimamente culpable por esto. 

¿Podré ponerme al corriente al volver, podré recuperar el tiempo perdido y mi salud también?



* Jamás pensé decir algo parecido, pero es la primera vez en la vida que desearía ser hombre. El machismo por mi nueva zona es demasiado fuerte y me intimida. Mi mecanismo de defensa ha sido hacerme aparentemente más fuerte, veo que al menos cada vez más me respetan, pero igual ha sido una situación bastante complicada.  

¿Habrá resultado buena esta estrategia de ingreso, habrá alguna mejor?



* Con vergüenza reconozco que me he vuelto demasiado comodona. Años atrás hubiera caminado horas bajo el sol, hoy tomo mototaxi. Tiempo atrás no me hubiera importado tomar el refresco que me dieran en cualquier lugar de comidas, hoy pregunto disimuladamente sobre la procedencia del agua.  

¿Me estaré aburguesando demasiado o simplemente corresponde a mi cuidado personal?



* Admito que durante esta temporada de viaje me está sirviendo para mirar atrás sin tanto dolor ni remordimiento. Ha ayudado a (re)convencerme que los pasos andados hasta ahora han sido los más acertados y convenientes. 

Admito que no me siento feliz, pero si tranquila, y sé bien que ese es un pacito más para llegar a la tan ansiada felicidad, ¿verdad?


* Debo aceptar que me ha costado estar sola. Hace bastante tiempo que no me encontraba así, pero poco a poco la he ido pasando mejor conmigo misma. Ir sola al concierto de Alberto Plaza en San Valentín y disfrutarlo plenamente fue una gran prueba de ello. Ok, sí, llamé a mi ser especial, sí, hubiera dado todo lo que tengo porque esté a mi lado, sí, algunas lagrimitas se acercaron a mis ojos en algunos momentos, y creo que si todo eso pasó es porque en verdad lo quiero. Pero a diferencia de otras veces no me quebré, no sentí ansiedad ni nada por el estilo. Asumí nuestra lejanía con madurez y sigo esperando volverlo a ver pronto. Lo que no me queda claro es si él entiende esto como yo.
 
¿Acaso no está mal sentirse morir por alguien, o significa que no te interesa tanto? yo no lo creo así, pero hay personas que difieren de mi. El tiempo y nuestros actos lo dirán.


* Es cierto, estoy empezando a tener temor de volver. Cada vez que estoy por mi cuenta me acostumbro a ser ama y soberana de mi tiempo, de mis emociones, de TODO. Pero cuando vuelvo a casa, a mi mundillo capitalino siento que eso a veces se esfuma. ¿Podré esta vez mantener esta tranquilidad y equilibrio al regresar? Cuestiono esto porque siempre cuando regreso siento que yo he cambiado alguito pero los demás no necesariamente lo han hecho y allí empiezan los problemas. Bueno, veremos también...


Dentro de todos los cambios, creo que, en conclusión, la tranquilidad me está visitando, no se si invitada por el mar o por mi misma, pero me gustaría que su estancia sea por tiempo indefinido. A ver cómo le hago para convencerla ;)


Escuché esta canción por primera vez en el concierto que dio recientemente The Cranberries y me impactó. Creo que no hay mejor canción para este post que "The Journey" de Dolores O´Riordan, que la disfruten!

viernes, 22 de enero de 2010

Al hombre de mi vida...







Hoy tus últimas palabras fueron categóricas: 

"Perdón, 
me retiro, 
buenas noches". 




No hubo más, ni el beso de buenas noches acostumbrado, ni las sonrisas cómplices, ni siquiera miradas ni palabras recriminatorias, N-A-D-A. Sólo te paraste y te marchaste, dejándome verdaderamente sorprendida. 

"¿Es que acaso te molestaste?", atiné a decir, mientras todo a mi alrededor me decía que sí y yo no terminaba de comprender. No podía creer que todo este tiempo juntos se iba al tacho luego de la noticia que te di. 

No podía creer cómo es que no te alegrabas conmigo por mi próximo viaje, el primero fuera del país que yo costearía totalmente con mis propios ingresos, mi primera aventura independiente, un sueño anhelado desde hace ya bastante tiempo y de la que ya te había hecho partícipe...

No podía creer como el hombre admirable con el que tanto había compartido, desde interminables tardes de domingo viendo tele en el sillón, hasta tertulias interesantísimas teniendo siempre el adecuado marco musical en su auto parqueado; aquel hombre que me ha apoyado siempre, que saltó de alegría cuando le dije que cruzaría el charco cuando apenas tenía 20 años, que ahora que tengo casi 26, que buscaba compartir esta nueva alegría contigo, ni siquiera dejaras que contara mi relato...


"Es que esta vez no te vas sola, te vas con otro y Él es tu papá", comentó mamá, con quien también compartíamos la mesa. 



Esto fue lo que me hizo reaccionar. 



Tu incomodidad, quizá, al sentirte desplazado, al ver que poco a poco me estoy yendo y en serio, te hicieron reaccionar así. 



Estabas claramente enfadado. Que yo recuerde ni en mi más terribles remolinos adolescentes, que fue la época donde tuvimos más encontronazos, te has parado y me has dejado con la palabra en la boca. JAMÁS. Esta vez te marchaste y me dejaste sola, porque así hubieran estado medio millón de personas a mi lado, tu ausencia y tu actitud me hicieron sentir abandonada, muy muy MUY sola.


¿Qué tengo que hacer para que me comprendas un poco más, papá? ¿Qué tengo que hacer para que veas que te amo desde lo más profundo de mi ser, pero sobre todo que te respeto y que no quiero que te marches así? ¿Es que acaso no debí viajar acompañada de mi pareja? ¿es que acaso eso está mal amar así a otro hombre? ¿por qué tu desaprobación? Se suponía que este debería ser un momento feliz y ya no lo es, no puede serlo sin tu aprobación. La tristeza y la angustia vuelven a mi, sabes bien que cualquier otra persona puede decirme que le parece mal lo que hago y yo me zurro en eso, pero contigo no puedo. No quiero irme así, sin sentir que tu estás de acuerdo, no puedo.

Te he dado muchas muestras que sé cuidarme bien y que sé tomar las mejores decisiones para mi y para nosotros, y que si llegado el momento me equivoco, seré responsable con eso y lograré avanzar. ¿Por qué no confías en mi ahora, por qué no confías en que esta vez también todo irá bien?

El hecho concreto es que ya tengo los pasajes, el perfecto acompañante y los sueños revoloteando mi cabeza concretizándose cada vez más. Además estoy convencida que mi decisión es la correcta, así que tengo casi 3 meses para cambiar este panorama contigo. Este es mi nuevo reto personal, papá, y al menos por aquí quería que lo supieras tal cual.

Te amo. En verdad te amo.

Yo.



*Cada vez que escucho esta canción pienso en ti, en mi, en nosotros, y las lágrimas aparecen una tras otra...